Esperanza y encarnación

 Jeremías 31:23 habla de la restauración y promete que Dios satisfará al alma cansada y Saciará a toda alma atribulada.

 Jeremías 31:27 anuncia días en los que Dios sembrará una nueva humanidad, una simiente de hombre y de animal, indicando un nuevo nacimiento espiritual.

Jeremías 31:32 compara la nueva alianza con Israel con el antiguo pacto, destacando que será diferente y no como la ley de Moisés que fue rota; aquí se expresa el deseo de Dios de ser esposo para su pueblo.

 La escritura de la ley en los corazones se realiza mediante la efusión del Espíritu Santo, marcando la nueva alianza.

 La estabilidad de las leyes naturales refleja el amor de Dios hacia su pueblo, incluso en tiempos de crisis.

La nueva ley, caracterizada por el Espíritu Santo, trasciende la mera guía externa y modela internamente el comportamiento.